¿Qué es disbiosis?

Ya hemos dicho que nuestra Microbiota Intestinal es un complejo ecosistema integrado por microorganismos que desempeñan diversas funciones benéficas para el organismo, no sólo digestivas, sino también inmunitarias, endócrinas, cerebrales y a nivel de sistema nervioso central.Como todo ecosistema, la Microbiota Intestinal debe mantener un equilibrio en cuanto a la diversidad, cantidad y distribución de los microorganismos que la componen. Es simple: las cepas de microorganismos benéficos deben superar en número a las perjudiciales.

En la Microbiota Intestinal, como en pocos sistemas integrados por organismos vivos, el equilibrio y el trabajo en equipo son fundamentales. Es más, podríamos asegurar que es el vivo ejemplo de cómo debería comportarse una sociedad justa, equilibrada y armoniosa.

Sólo de esta forma se puede garantizar que la Microbiota Intestinal desempeñe sus funciones de manera eficiente en un individuo sano. A este estado de equilibrio se le llama “eubiosis”.

Pero dicho estado de equilibrio y armonía a veces es alterado por factores externos. A pesar de que nuestra Microbiota Intestinal es un ecosistema que se autorregula, es vulnerable y está expuesta a factores que la vuelven inestable, entrando en un estado llamado “disbiosis”, que no es otra cosa que el desequilibrio en la riqueza y composición de los microorganismos que la integran.

Una Microbiota Intestinal en estado de disbiosis podría caracterizarse por:

• Menor cantidad de especies bacterianas benéficas para la salud.
• Predominio de bacterias causantes de enfermedades.
• Reducción de la diversidad de familias bacterianas.Entre los factores más comunes que podrían ser causantes de disbiosis intestinal se han encontrado:
• Consumo crónico y/o temprano de antibióticos
• Estrés
• Una dieta desequilibrada
• Poca ingesta de fibra
• Infecciones bacterianas, parasitarias o virales
• Inmunodeficiencia
• Cambios repentinos en la alimentación (por ejemplo durante los viajes)

Es necesario saber que la disbiosis intestinal es causa de condiciones adversas para la salud en general. Como ya hemos dicho, nuestra Microbiota Intestinal y sus funciones no dejan de sorprendernos, y aunque está constantemente en investigación se han encontrado vínculos entre la disbiosis y enfermedades como: diabetes, alergias, obesidad, síndrome de intestino irritable, síndrome metabólico, desórdenes funcionales del colon, cáncer, trastornos en el sistema nervioso central, enfermedad celiaca, entre otras que se encuentran aún bajo investigación y que estarán dando de qué hablar en los próximos años.