Probióticos: ¿Un nuevo estilo de vida?
por Floratil | 23 febrero, 2021 | 0 comentariosMantener un estado de salud integral es una preocupación constante, sobre todo con el acelerado ritmo de vida que llevamos en la actualidad: jornadas laborales largas, interminables trayectos acompañados del ruido y estrés del tráfico y las aglomeraciones, sin dejar de lado el incesante bombardeo de información que la mayoría de las veces te genera más preocupación que alivio.
Y, lamentablemente, todo ello afecta de forma directa la salud de tu Microbiota Intestinal, la cual, como ya sabes, juega un papel vital para el correcto funcionamiento del organismo. Sí, ese conjunto de microorganismos compuesto por bacterias, hongos, arqueas, virus y parásitos benéficos que se alojan en nuestro sistema gastrointestinal y que se encargan de hacer frente a virus y bacterias que lo enferman.
El adecuado equilibrio de estos microorganismos le permite a tu cuerpo funcionar de forma correcta y saludable; sin embargo, al mismo tiempo que tu microbiota es fuerte, también es sumamente sensible a factores medioambientales y conductas que la llevan a un estado de disbiosis o desequilibrio, entre ellos podemos mencionar:
- Dormir menos de siete horas diarias.
- Mantener un constante estado de estrés.
- Llevar una vida sedentaria que fomenta la obesidad.
- Consumir alimentos industrializados ricos en grasas saturadas y carbohidratos.
- Pobre ingesta de fibra.
- Hábitos de higiene exagerados.
- Abusar del consumo de antiácidos y analgésicos.
- Consumo constante de antibióticos.
Lectura recomendada: «Haz feliz a tu Microbiota Intestinal en 3 pasos».
Modificar hábitos y rutinas
Durante mucho tiempo has creído que vivir de prisa es normal y que ya habrá tiempo para descansar, la realidad es que modificar tu estilo de vida para desacelerar tu ritmo redundará en una salud gastrointestinal equilibrada que te permitirá disfrutar el día a día con menos molestias que ir corriendo hacia todos lados.
Nuestro consejo es que intentes:
- Adoptar una alimentación sana y variada que incluya alimentos fermentados ricos en probióticos (yoghurt, col fermentada, aceitunas, brócoli, etc.).
- Realizar rutinas de ejercicios que relajen tu cuerpo y mente, quizás pequeñas caminatas, algunos ejercicios de yoga o meditación.
- Procurar que tu descanso sea reparador, evitando el uso de aparatos electrónicos que te distraen, como el celular o la televisión.
- Buscar un pasatiempo que te distraiga del trajín de la vida diaria, la lectura, pintar o tocar un instrumento son sumamente relajantes.
- Consumir medicamentos sólo si es necesario y en el caso de los antibióticos consultar con tu médico si los puedes acompañar de un probiótico en presentación farmacéutica para prevenir los daños que pueden causar a tu microbiota intestinal.
A favor de la vida
Si bien la microbiota intestinal se forma por factores primarios como el tipo de nacimiento (parto natural o cesárea) o la alimentación en los primeros mil días de vida (seno materno o fórmula láctea, entre otros), ésta sufre constantes modificaciones a lo largo de tu vida, por lo tanto al modificar de manera positiva tu estilo de vida estás ayudando a que la calidad y cantidad de microorganismos que la integran alcancen un equilibrio adecuado y favorable para tu salud desde un enfoque integral.
Un gran aliado para lograrlo son los probióticos, cuya definición literal es “a favor de la vida”, así que consumirlos, ya sea en los alimentos que los contienen de forma natural o preguntando a tu médico cuál es la presentación farmacéutica que más te conviene, te ayudará a mejorar tu sistema inmunológico, aprovechar mejor los nutrientes de tus alimentos y mejorar tu digestión, aligerando los estragos que causa en tu organismo la acelerada vida moderna.
¡Recuerda que vivir es más que correr!
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