Gastroenteritis viral: Esa diarrea que debes conocer

También conocida como “gripe estomacal”, la gastroenteritis viral es un cuadro diarréico infeccioso causado por un virus y es más común de lo que pensabas.

Muchas veces, cuando escuchamos hablar de “diarrea” de inmediato nos imaginamos un festín de bacterias nocivas haciendo gala de maldad dentro de nuestro estómago, causándonos estragos adicionales como vómito, náuseas y cólicos.

Pero las bacterias no siempre son las responsables de todas las infecciones estomacales. Existen algunos virus que son capaces de producir infecciones tan severas como las bacterianas, causando los mismos estragos y repercusiones en la calidad de vida de quienes las padecen, como el ausentismo escolar y laboral.

Aquí te explicamos todo acerca de la “diarrea viral” o “gripe estomacal”:

¿Qué es?

La gastroenteritis viral es una infección intestinal (de origen viral), caracterizada por diarrea acuosa, dolor o cólico estomacal, y en ocasiones náusea y vómitos. Conocer acerca de esta enfermedad es relevante, ya que ocasiona cuadros de deshidratación severos en adultos mayores y niños menores de 5 años.

A nivel mundial se estima que una persona puede experimentar entre 3 y 8 episodios de gastroenteritis viral a lo largo de su vida.

¿Cómo se adquiere?
La causa más común de gastroenteritis viral son los norovirus. Estos agentes infecciosos son responsables de la muerte de 200 mil pacientes pediátricos cada año alrededor del mundo.

Los norovirus son un grupo de virus que pueden adquirirse a través de agua y alimentos contaminados, o por contagio directo de una persona infectada. La intensidad de la enfermedad que producen puede ser de leve a severa, afectando más de forma severa a la población pediátrica y de la tercera edad.

Las causas más comunes de adquisición de los norovirus son:
• Consumir agua o alimentos contaminados (preparados con escasa higiene).
• Asistir a estancias infantiles.
• Vivir en espacios poco ventilados.
• Contagio directo de persona a persona.

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Cabe recordar que en el pasado, el rotavirus era la principal causa de gastroenteritis viral, pero debido a las intensas campañas de vacunación contra este agente, se ha logrado reducir su impacto en la salud mundial. Actualmente se está trabajando en el desarrollo de vacunas contra los norovirus, para mitigar su propagación y consecuencias.

¿Cuáles son sus síntomas?
Después de 12 a 48 horas de la exposición al virus, pueden presentarse los siguientes signos y síntomas, que pueden durar entre 1 y 3 días:

• Dolor abdominal o cólicos.
• Diarrea acuosa.
• Náusea y/o vómito.
• Malestar general.
• Fiebre (en ocasiones).

¿Qué complicaciones podrían presentarse?

Como la mayoría de las enfermedades diarréicas, la complicación más frecuente y riesgosa es la deshidratación, por lo que es necesario mantenerse alerta a sus probables signos, como boca seca, escasez de orina, fatiga o sed excesiva y en los bebés es común el llanto sin lágrimas y la fontanela (o mollera) hundida. En este caso, es necesario acudir de inmediato a recibir asistencia médica.

Otras complicaciones pueden ser: fatiga severa, desnutrición y malestar generalizado, provocando ausentismo escolar y laboral.

¿Cuál es el tratamiento?

Por tratarse de una infección de origen viral, la gastroenteritis viral NO requiere de la administración de antibióticos.

Sin embargo, es necesario acudir al médico para que haga una minuciosa revisión del paciente y confirme la causa de la infección.

En paralelo al reposo, el médico podrá indicar medicamentos para reducir la intensidad de los malestares, líquidos para evitar la deshidratación, y muy seguramente un probiótico en presentación farmacéutica que ayude a controlar los episodios de diarrea mientras restaura la Microbiota Intestinal.

Como en todos los casos, recomendamos evitar la automedicación, y darle a cada manifestación de la enfermedad la importancia necesaria para evitar complicaciones.

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¿Se puede prevenir la gastroenteritis viral?

A pesar de que los norovirus se propagan con una gran facilidad y que una persona puede contagiarse más de una vez a lo largo de su vida, es posible prevenir el contagio atendiendo a las siguientes medidas:

• Evita consumir alimentos en establecimientos de dudosa higiene.
• Lávate las manos antes y después de ir al baño.
• No saludes de mano a personas enfermas.
• Lava y desinfecta con agua limpia las frutas y verduras.
• Asegúrate de que los pescados y mariscos estén bien cocinados antes de consumirlos.