5 beneficios que los probióticos aportan a tu salud
por Floratil | 18 febrero, 2021 | 0 comentariosDesde siempre, la humanidad ha consumido probióticos. Sin estar muy conscientes del beneficio que éstos aportan a la salud, desde hace siglos distintas culturas han desarrollado y consumido probióticos en su forma más ancestral: los fermentos.
La técnica de la fermentación es la más antigua y saludable para conservar los alimentos y protegerlos de la descomposición y de la acción de las bacterias nocivas.
Ejemplos hay muchos. Apenas podemos mencionar el saukreaut (col agria alemana), los pepinillos agridulces, la levadura fresca, los quesos, jocoques y yogures, las aceitunas en conserva, la salsa de soya, y hasta el mexicanísimo pulque…una larga lista de alimentos de manufactura artesanal, ricos en probióticos y que han sido consumidos desde hace siglos.
En la actualidad existen diversas formas de probióticos. Están presentes tanto en alimentos como los que ya mencionamos (siempre y cuando su elaboración sea la menos industrializada posible), pero también en presentaciones más modernas y accesibles como cápsulas, sobres, ampolletas, suplementos, fórmulas lácteas, entre otros.
Hay que recordar que la Organización Mundial de la Salud ha definido a los probióticos como “microorganismos vivos que, cuando son administrados en cantidades adecuadas, confieren beneficios a la salud del huésped”, y justamente de algunos de esos beneficios hablaremos aquí.
Partiendo del hecho de que la principal acción de los probióticos es la modificación positiva de la microbiota intestinal restaurando y/o conservando su equilibrio y diversidad, a los probióticos se les han atribuido al menos los siguientes beneficios:
- Reducen la aparición o la frecuencia de las enfermedades infecciosas gastrointestinales: Al colonizar las paredes intestinales, las bacterias benéficas no dejan espacios libres para la instalación y proliferación de bacterias nocivas.
- Mejoran el sistema inmunitario (del organismo en general y del intestino en específico): Una microbiota intestinal diversificada y equilibrada “entrena” al sistema inmune, enseñándole a distinguir entre microorganismos benéficos y los que no lo son.
- Mejoran la función intestinal: Algunas bacterias probióticas poseen genes capaces de producir sustancias que mantienen las vellosidades intestinales en buen estado, lo que se traduce en una mejor asimilación de los alimentos, vitaminas y minerales.
- Actúan contra la diarrea: Está comprobado que en casos de diarrea infecciosa o la causada por la ingesta de antibióticos, la administración de probióticos en presentaciones farmacéuticas acortan la duración y severidad de los episodios diarréicos.
- Ayudan a tolerar la lactosa: Ciertas cepas de probióticos ayudan a la degradación de la lactosa presente en los productos lácteos, evitando los síntomas derivados de la intolerancia a estos alimentos, como distensión abdominal, flatulencias o diarrea, entre otros.
Como podemos darnos cuenta, los probióticos han cobrado especial relevancia en las décadas recientes, debido a los múltiples beneficios que se les atribuyen y, aunque se habla de muchos más, todavía se requerirán estudios más profundos para validar estas propiedades, o incluso descubrir nuevas que aportarán múltiples beneficios a la salud humana.