Post

EJE CEREBRO – INTESTINO – MICROBIOTA ¿EXISTE?

por wordpressuser | 30 agosto, 2022 | 0 comentarios

¡Claro que existe! ¿Alguna vez te ha pasado que estés tan nervioso que te dan ganas de ir al baño? o ¿Te ha pasado que tienes una cita romántica con alguien y sientes las famosas “mariposas en el estómago”?

Bueno, pues estas sensaciones son la viva imagen de que existe una estrecha comunicación bidireccional entre nuestro intestino y nuestro cerebro y esta conexión va mucho más allá de sentir mariposas en el estómago. Los científicos han llamado a este diálogo entre órganos tan distantes el famoso Eje Intestino – Cerebro en donde fluye información constantemente entre estos dos órganos. Sin embargo, recientemente se ha observado en diversos estudios que la Microbiota Intestinal tiene un papel super importante para que esta comunicación se lleve a cabo de una forma efectiva.

Los mecanismos por los cuales se comunican el intestino y la microbiota con el cerebro y viceversa, son un poco complejos, pero en este blog te lo vamos a intentar explicar lo más sencillo que podamos y con algún ejemplo.

Empecemos por decir que se ha considerado a nuestro sistema gastrointestinal como “el segundo cerebro” ya que en este se alojan más de 100 millones de neuronas (en el cerebro hay 100 mil millones aproximadamente) y por lo tanto el cerebro y el intestino están conectados por vía nerviosa.

Ahora nuestros microorganismos intestinales envían señales al cerebro, y viceversa, a través de varios enlaces (neuronal, endócrino, inmunológico) y se ha hecho cada vez más evidente que cuando la Microbiota Intestinal está desequilibrada, estas comunicaciones pueden afectar funciones cognitivas y de comportamiento como el aprendizaje, la memoria y la toma de decisiones. Debido a esto, existen diferentes teorías de que múltiples enfermedades neurodegenerativas tienen su origen a nivel intestinal. Por ejemplo, el deterioro cognitivo, la enfermedad de Alzheimer, la depresión, la esclerosis múltiple, la enfermedad de Parkinson, entre otras.

Un ejemplo puede ser el siguiente: la Microbiota intestinal es la principal precursora de diferentes neurohormonas como la serotonina. La serotonina es conocida coloquialmente como ‘la hormona de la felicidad’ y el 90% de la serotonina se produce a nivel intestinal y de ahí, es capaz de atravesar al torrente sanguíneo, cruzar la barrera hemato-encefálica y llegar al cerebro para ejercer su acción principal: mantenernos contentos. Cuando no se produce la suficiente cantidad de serotonina nos podemos sentir tristes y es por esto que la depresión se ha relacionado a un desequilibrio persistente en la Microbiota Intestinal. 

Por esta razón es muy importante considerar que tan profundo puede ser el efecto que nuestro intestino y nuestra microbiota puede tener en nuestra salud, cuerpo y mente. La importancia de mantener saludable nuestro intestino y nuestro ecosistema de microorganismos que habitan en él va mucho más allá del mismo intestino, y es por esto que los estudios se han enfocado en la introducción de probióticos de alta calidad como herramientas terapéuticas para mantener saludable nuestra Microbiota Intestinal.

Te recordamos que Floratil es un probiótico de levadura de alta calidad que ha demostrado proteger y a restaurar el equilibrio de la Microbiota intestinal.