Post

¡SOMOS MÁS MICROORGANISMOS QUE HUMANO! TE EXPLICAMOS…

por wordpressuser | 8 abril, 2022 | 0 comentarios

Como ya te hemos platicado, nuestro cuerpo esta abundantemente habitado por diferentes tipos de microorganismos, principalmente bacterias, pero también virus, hongos, archeas y parásitos. Estos no solo habitan el tracto gastrointestinal, sino que habitan en todas las mucosas. Por ejemplo, tenemos microorganismos en toda la extensión de nuestra piel, en la mucosa de los ojos y de la nariz, en todo el tracto respiratorio, en los conductos auditivos, en la mucosa vaginal, en el tracto urinario y por supuesto en el tracto gastrointestinal. Prácticamente están en todas partes y, ¿que crees?, no podemos vivir o funcionar sin ellos. A estas comunidades de microorganismos se les conoce como Microbiotas.

Las Microbiotas y nosotros vivimos en simbiosis. Esto quiere decir que ellas se benefician de nosotros y nosotros de ellas. Vivimos en constante interacción. De hecho, en nuestro cuerpo existen más células microbianas que células nucleadas humanas. Es decir que por cada célula nucleada nuestra hay 10 células microbianas. ¿Puedes creerlo? Si no contamos los glóbulos rojos (que son células sin núcleo, ósea, sin material genético), podemos decir que somos más microorganismo que humano. Ahora, si contamos los glóbulos rojos se podría decir, que por cada célula humana hay 1 célula microbiana. Puede parecer poco pero el hecho de poseer la misma cantidad de células humanas que de células microbianas es como afirmar que somos ‘mitad humano y mitad microorganismo’.

Ahora, por si fuera poco, no solo habitan en nosotros estos microorganismos, sino que su material genético interactúa con el material genético de nosotros. Y si tomamos en cuenta que por cada célula humana nucleada existen 10 células microbianas, esto quiere decir que en nuestro cuerpo podría haber 100 veces más genes de microorganismos que nuestros. Una vez más podríamos decir que somos más microorganismo que humano ya que en nuestro cuerpo hay más material genético de microorganismos que nuestro.

El ser humano, por lo tanto, no vive solo, no es independiente. Vive en simbiosis. Somos una comunidad dinámica e interactiva entre células humanas y microbianas. En condiciones ideales, nos beneficiamos el uno al otro, sin embargo, también nos podemos perjudicar el uno al otro.

Si nosotros perjudicamos y cambiamos la composición de nuestras Microbiotas con malos hábitos alimentarios, con un estilo de vida sedentario, con abuso de sustancias como tabaco y alcohol, con estrés, con pocas horas de sueño, con uso crónico e indiscriminado de medicamentos como antibióticos, antiinflamatorios y antiácidos, entonces ellas nos pueden perjudicar a nosotros poniendo a nuestro cuerpo en un estado reactivo y que promueve la inflamación y por lo tanto aumentar el riesgo de presentar enfermedades inflamatorias. En cambio, si nosotros cuidamos de esta comunidad que nos supera en número y genoma, con una vida activa, meditativa, con una adecuada alimentación rica en alimentos como frutas y verduras, sin abusar de medicamentos y con el consumo de probióticos como Floratil, que nos ayuden a mantenerla saludable y equilibrada, podremos observar cambios en nuestra salud para bien tanto a corto como a mediano y largo plazo.